Cada mañana, nuestros chicos salen con sus carritos de la compra para llevarte el café en grano recién tostado a tu oficina. Todos ellos son especiales y lo notas en cuanto llegan, por su alegría y sus ganas de hacerlo bien. Y les encanta que les cuentes cómo te va el día.

Son chicos y chicas procedentes de diversas organizaciones sociales que tienen algún tipo de discapacidad o factores de riesgo de exclusión social.

Todos ellos son perfectamente capaces de operaciones como la reposición del café, el mantenimiento y conservación de las máquinas y asegurarse de que todo funciona correctamente.

Nosotros confiamos en ellos y nuestros clientes siempre nos cuentan cómo cada vez que llegan a sus oficinas se nota en el ambiente. Son un soplo de aire fresco... con aroma a café del bueno.